Jaime de Almeyda. "Pitín" posee una gran experiencia y gran facilidad de concepción
Su gran capacidad técnica, su velocidad física y la rapidez de sus reacciones unidas a su gran experiencia le permiten hacer goles desde atrás. Tipo de sprinter. El y los otros.
Como toda actividad en la vida, el jugador tiene también sus fases en las cuales puede rendir grandes partidos o dar encuentro no muy buenos o detestables. Esto que le sucede a un jugador, también acontece con los equipos. Los cuadros tienen periodos en los cuales se reflejan las condiciones físico-técnicas por las que atraviesan en determinados momentos sus hombres. Si los hombres que integran una escuadra no están bien, lógicamente el equipo resiste su accionar. Para que el cuadro rinda bien y parejo es necesario que todos los hombres, como piezas de una máquina, respondan a la exigencia que de ellos demanda la función que tienen en la cancha.
Por eso a nadie debe extrañar que diga que hay periodos de plenitud para un jugador, momentos en los cuales el hombre llega a un momento estelar. Esto es lo que sucede ahora con "Pitin" Zegarra, que figura con Buzzone a la cabeza de la Tabla de Goleadores del Campeonato. Para muchos que no estén al corriente del estado físico por el que hoy atraviesa este jugador, les llamará la atención de que haga goles y esté con un número de tantos insospechado, pese a que él no actúa precisamente adelante, sino que su función es la de jugar "desde atrás". Pero es que "Pitín" está ahora en la plenitud. En su mejor estado. Esto le permite, gracias a su gran capacidad técnica y a su formidable velocidad de reacción, llegar a tiempo cuando la pelota está cerca a la meta contraria y se necesita de un hombre que la impulse y corone finalmente la jugada.
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Víctor "Pitín" Zegarra. |
"Pitin" Zegarra no tiene el tipo del goleador. No es el hombre de shot aterrador ni de físico apropiado para la jugada impetuosa y ruda. Pero viéndolo fisiológicamente, su tipo es el del sprinter. Biológicamente hablando pertenece al grupo de los atletas ligeros. Por eso dije antes que tiene reacciones rápidas, capacidad técnica y mucha velocidad. Él, Zegarra, a diferencia de otros jugadores que ocupan un puesto y que sólo lo cubren pudiendo desbordarse máximo en la zona inmediata a él, como por ejemplo Zavala, por su lentitud, a diferencia de ellos, digo, Zegarra, por su velocidad, puede cubrir su zona, su puesto y aun abarcar otras zonas más lejanas y aún todo el campo sin que ello lo afecte técnica o físicamente.
Además de estas virtudes que son vitales, "Pitín" posee una gran experiencia y gran facilidad de concepción. Esto facilita su labor ahora que él está en la plenitud de sus medios y puede, por eso, hacerse presente en el marcador sin ser goleador. Esto, también, facilita el trabajo del entrenador porque con él, como con todos los demás jugadores, se hace un trabajo de entrenamiento igual, sin dedicarle nada especial. Los entrenamientos de Zegarra son standard: los mismos que hacen todos sus compañeros de equipo. Lo demás lo ponen sus condiciones innatas de jugador de fútbol.
En hombres como Zegarra, y quiero recalcarlo, el positivismo frente al arco es producto, exclusivamente, de su intuición y sus condiciones naturales. Con hombres como él se pueden hacer sistemas de juego y fijar planteamientos que de otra manera serían difíciles de llevar a la práctica.
En este sentido, quiero afirmar ya que la oportunidad me lo brinda, que Alianza, felizmente, ha reunido un grupo de jugadores que actúan con gran regularidad, lo que aumenta la capacidad y el volumen de juego del equipo. En realidad los resultados obtenidos hasta ahora no son sino el producto de la suma de la capacidad técnica del conjunto, que permite aplicar sistemas y que estos tengan éxito.
Ningún sistema táctico tiene éxito si el jugador no responde técnica y físicamente. Nosotros en Alianza sólo aprovechamos la calidad de los jugadores, le damos el entrenamiento adecuado y justo y tratamos de sacar de ellos el mayor beneficio posible para bien del cuadro y de la institución.
*La Crónica, Lima, 9 de octubre de 1964.
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